Tu tienda de Balonmano

martes, 1 de octubre de 2013

La guerrilla

Foto : Balonmano Aragón

Frigorificos del Morrazo Cangas salvó el año pasado la categoría en una agónica última jornada. Un equipo de los que se denomina “ascensor”, íntimamente enroscado con su localidad y con sus categorías inferiores en un sentido pleno de lo que significa un “club deportivo”. Es decir, un club en el que siempre ha primado su identidad, hasta el punto de llegar a declarar la guerra a la Asobal como entidad deportiva que controla la división de honor del balonmano español. No es momento de analizar las connotaciones de esa batalla sino de hacerse a la idea de la idiosincrasia de los pontevedreses. Esos principios innegociables hoy se cotizan al alza y es muy posible que todos los apuros del año pasado no se repitan en la presente temporada.

Esa identidad de profundas raíces es un punto de partida muy favorable para moverse con éxito en las turbias aguas del balonmano patrio actual. El bloque se conoce, su cancha aprieta y los refuerzos han sido acertados. Dos porteros foráneos con buena pinta (Schmidl y Mijuskovic) y, sobre todo, el retorno de un hijo pródigo como es Alen Muratovic. Lo de Muratovic, salvando las diferencias, tiene un cierto parecido al caso de Demetrio Lozano: El uno con el hombro en cuarentena y el otro cerca de la cuarentena siguen siendo referencias absolutas en esta empobrecida liga. Además, David García en el centro, Pousada en el lateral zurdo o Rosales en el extremo diestro son jugadores que tienen ya un nombre y un nivel. Todo esto bien mezclado, de lo que se encarga el técnico Pillo, implica que lo que antes eran escasos recursos ahora son hechos diferenciales. En conclusión, unos equipos venidos a menos, como es el caso del Aragón, tienen una papeleta complicada a la hora de puntuar en sitios como Cangas del Morrazo.

Desde luego, no es una quimera hacerlo. Pero el contraste, y la dificultad, residen en que un equipo en construcción, con muchas cosas por definir, se las ve con otro tal vez con menos potencial que, no obstante, sabe perfectamente el qué es y el cómo hacerlo. No podemos ignorar la otra cara de moneda: ganar en Cangas significaría, primero, que consolidamos a este Aragón verdecito y, segundo, que hemos resuelto unas cuantas de las incógnitas que anidan detrás del equipo. Contundencia defensiva, mucha más de la mostrada hasta ahora sean quiénes sean sus protagonistas, para que Jorge Gómez para todavía más; posibilidad de contraataque para aprovechar esas delicias de extremo que tenemos, como decía Jorgete; un ataque que dialogue con la segunda línea, tanto el pivote como los extremos; una primera línea que encuentre los nombres adecuados. Todo, a fin de cuentas, características de un equipo maduro. Con ir solventado alguna, tendremos posibilidades de ganar en Cangas. Incluso con una primera parte como la del día de Granollers. Mañana a partir de las 20:45 lo vamos comprobando.






Fdo.: Álvaro Lombardo Sáez

No hay comentarios: